La Biblia es un libro muy profundo. Si
la lees, te revelará constantemente más y mayores verdades. Verás que la Biblia
es un campo de estudio tan enorme, fascinante, amplio y profundo que, tal como afirmó
el profeta Ezequiel, es como «aguas que se han de pasar a nado» (Ezequiel
47:5). De modo que ¡zambúllete y échate a nadar! Deléitate en las profundidades
de Su Palabra. En esas refrescantes aguas de la Palabra que darán alimento a tu
alma y fuerzas a tu cuerpo, que renovarán tu mente, elevarán tu espíritu,
llenarán de aliento tu corazón y purificarán todo tu ser.
Debes desear tanto la leche pura
de la Palabra como un recién nacido desea la leche materna (1Pedro 2:2). Existe
un viejo dicho sobre la salud que afirma: «Eres lo que comes.» Es así en el
aspecto espiritual, eres lo que lees o recibes por otros medios. Vigila, pues,
que tu alimentación espiritual sea sana: la buena, nutritiva, edificante,
alentadora, reconfortante y alimenticia verdad de la Palabra de Dios. Dios te
bendecirá en tanto que absorbas Su Palabra.
(Oración:) Ayúdanos, Jesús, a recordar
lo que el rey David dijo acerca de Tu Palabra: El secreto para ser bendecido en
todo lo que hacemos es vivir en Tu Palabra día y noche (Salmos 1:2,3). Ayúdanos
a hacer eso mismo. Amén.
LA PALABRA DE DIOS
-
Cuando era ya uno de los comerciantes más prósperos de
Estados Unidos, John Wanamaker dijo una vez: "He comprado muchas cosas en
la vida; entre ellas muchas que me costaron miles de dólares. Pero la mejor
compra de mi vida la hice a los doce años, cuando compré una Biblia por dos
dólares y medio. Fue la mejor compra de mi vida, pues esa Biblia hizo de mí lo
que hoy soy." John Wanamaker se convirtió en un hombre prominente porque
de pequeño amaba a Dios y a la Palabra. Amaba la Biblia, la leía y obedecía sus
enseñanzas.
-
Hudson Taylor, fundador de la famosa Misión Continental
de la China, se convirtió al leer un pequeño folleto en la biblioteca de su
padre cuando contaba quince años. Lo tomó distraídamente, para matar el tiempo,
pero a cien kilómetros de allí su madre rogaba por su salvación. ¡Al volver a
depositar la hoja en su lugar, su corazón se regocijaba sabiendo que sus
pecados habían sido perdonados! ¡Si uno piensa en la extraordinaria labor
realizada por la obra misionera que él fundó, no puede menos que maravillarse
al reflexionar sobre el elemento insignificante que Dios utilizó para iniciarlo
todo!
-
Has engrandecido tu nombre, y tu palabra sobre todas las
cosas. En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era
Dios. (Sal.138:2, Jn.1:1
-
Muchas personas luchan innecesariamente toda la vida,
mientras que si pasaran un poco más de tiempo en la Palabra de Dios,
encontrarían la paz, fe y felicidad que buscan.
-
¡El secreto del poder, de la victoria, la superación y la
productividad, del fuego, la vida, el calor, la luz y el liderato, y de todo es
la Palabra!
-
Nunca subestimen el poder de la Palabra.
-
¡La Biblia es una ventana en esta prisión llamada mundo,
a través de la cual miramos hacia la eternidad!
-
¡En el mundo existen dos grandes poderes, la espada y la
pluma! Al final, la última siempre conquista a la primera.
-
La Palabra de Dios abarca todo: ¡Dice toda la verdad y
solamente la verdad!
-
Los pasajes de la Escritura que incomodan a la mayoría de
la gente no son los que no entienden, sino los que sí entienden.
-
La mayor parte de la gente no lee la Biblia, no porque no
la entienda, ¡sino porque pueden entenderla y no les gusta escucharla!
-
Leer la Palabra sin reflexionar, es como comer sin
digerir.
-
¡Todo lo que la Biblia predice, siempre se ha hecho
realidad!
-
Lo más importante es conocer la Palabra. La fe se edifica
en la Palabra.
-
DEUT.4:5,6 Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos,
como el Señor mi Dios me mandó, para que hagáis así en medio de la tierra en la
cual entráis para tomar posesión de ella. Guardadlos, pues, y ponedlos por
obra; porque esta es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de
los pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos, y dirán: Ciertamente
pueblo sabio y entendido, nación grande es esta.
-
DEUT.32:46,47a y les dijo: Aplicad vuestro corazón a
todas las palabras que yo os testifico hoy, para que las mandéis a vuestros
hijos, a fin de que cuiden de cumplir todas las palabras de esta ley. Porque no
os es cosa vana; es vuestra vida, y por medio de esta ley haréis prolongar
vuestros días sobre la tierra.
-
JOS.1:8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la
ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas
conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu
camino, y todo te saldrá bien.
-
JOS.23:14b Reconoced, pues, con todo vuestro corazón y
con toda vuestra alma, que no ha faltado una palabra de todas las buenas
Palabras que el Señor vuestro Dios había dicho de vosotros; todas os han
acontecido, no ha faltado ninguna de ellas.
-
1SAM.3:19 Y Samuel creció, y el Señor estaba con él, y no
dejó caer a tierra ninguna de sus palabras.
-
JOB 23:12 Del mandamiento de sus labios nunca me separé;
guardé las palabras de su boca más que mi comida.
-
SAL.1:2 Sino que en la ley del Señor está su delicia, y
en su ley medita de día y de noche.
-
SAL.12:6 Las palabras del Señor son palabras limpias,
como plata refinada en horno de tierra, purificada siete veces.
-
SAL.68:11 El Señor daba palabra; había grande multitud de
las que llevaban buenas nuevas.
-
SAL.102:18 Se escribirá esto para la generación venidera;
y el pueblo que está por nacer alabará a JAH,
-
SAL.105:8 Se acordó para siempre de su pacto; de la
palabra que mandó para mil generaciones.
-
187. SAL.119:9 ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con
guardar tu palabra.
-
SAL.119:11 En mi corazón he guardado tus dichos, para no
pecar contra ti.
-
SAL.119:14 Me he gozado en el camino de tus testimonios
más que de toda riqueza.
-
SAL.119:18 Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu
ley.
-
SAL.119:42 Y daré por respuesta a mi avergonzador, Que en
tu palabra he confiado.
-
SAL.119:72 Mejor me es la ley de tu boca que millares de
oro y plata.
-
SAL.119:89 Para siempre, oh Señor, permanece tu palabra
en los cielos.
-
SAL.119:103 ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras!
Más que la miel a mi boca.
-
SAL.119:105 Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera
a mi camino.
-
SAL.119:127 Por eso he amado tus mandamientos más que el
oro, y más que oro muy puro.
-
SAL.119:130 La exposición de tus palabras alumbra; hace
entender a los simples.
-
SAL.119:148 Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la
noche, para meditar en tus mandatos.
-
SAL.119:160 La suma de tu palabra es verdad, y eterno es
todo juicio de tu justicia.
-
SAL.138:2b Porque has engrandecido tu nombre, y tu
palabra sobre todas las cosas.
-
PRO.4:20,21 Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina
tu oído a mis razones. No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu
corazón;
-
PRO.6:20-23 Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre,
y no dejes la enseñanza de tu madre; Atalos siempre en tu corazón, enlázalos a
tu cuello. Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; hablarán
contigo cuando despiertes. Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es
luz, y camino de vida las reprensiones que te instruyen,
-
ISA.34:16 Inquirid en el libro del Señor, y leed si faltó
alguno de ellos; ninguno faltó con su compañera; porque su boca mandó, y los
reunió su mismo Espíritu.
-
ISA.40:8 Sécase la hierba, marchítase la flor; más la
palabra del Dios nuestro permanece para siempre.
-
ISA.46:10b,11b Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que
quiero; Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré.
-
ISA.55:10,11 Porque como desciende de los cielos la
lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace
germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será
mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo
quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.
-
JER.15:16 Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y
tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón; porque tu nombre se
invocó sobre mí, oh Señor Dios de los ejércitos.
-
JER.23:29 ¿No es mi palabra como fuego, dice el Señor, y
como martillo que quebranta la piedra?
-
JER.31:33 Pero este es el pacto que haré con la casa de
Israel después de aquellos días, dice el Señor: Daré mi ley en su mente, y la
escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por
pueblo.
-
AMÓS.8:11 He aquí vienen días, dice el Señor Dios, en los
cuales enviaré hambre a la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de
oír la palabra del Señor.
-
HAB.2:2 Y el Señor me respondió, y dijo: Escribe la
visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella.
-
MAT.4:4 No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda
palabra que sale de la boca de Dios.
-
MAT.5:18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el
cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se
haya cumplido.
-
MAT.22:29 Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis,
ignorando las Escrituras y el poder de Dios.
-
MAT.24:35 El cielo y la tierra pasarán, pero Mis palabras
no pasarán.
-
LUC.21:33 El cielo y la tierra pasarán, pero Mis palabras
no pasarán.
-
LUC.24:45 Entonces les abrió el entendimiento, para que
comprendiesen las Escrituras.
-
JN.1:1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con
Dios, y el Verbo era Dios.
-
JN.6:63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada
aprovecha; las palabras que Yo os he hablado son espíritu y son vida.
-
JN.14:23,24 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, Mi
palabra guardará; y Mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con
él. El que no me ama, no guarda Mis palabras; y la palabra que habéis oído no
es mía, sino del Padre que me envió.
-
JN.15:3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os
he hablado.
-
JN.17:17 Santifícalos en Tu verdad; Tu palabra es verdad.
-
JN.20:31 Pero éstas se han escrito para que creáis que
Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en Su
nombre.
-
1COR.10:11 Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y
están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines
de los siglos.
-
2COR.3:3 Siendo manifiesto que sois carta de Cristo
expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios
vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón.
-
EFE.5:26 Para santificarla, habiéndola purificado en el
lavamiento del agua por la palabra.
-
EFE.6:17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada
del Espíritu, que es la palabra de Dios.
-
COL.3:16a La palabra de Cristo more en abundancia en
vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría.
-
1TES.2:13 Por lo cual también nosotros sin cesar damos
gracias a Dios, de que cuando recibisteis la Palabra de Dios que oísteis de
nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad,
la Palabra de Dios, la cual obra eficazmente en vosotros los que creéis.
-
2TIM.3:16,17 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y
útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a
fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda
buena obra.
-
HEB.1:3a Quien sustenta todas las cosas con la palabra de
su poder.
-
HEB.4:2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la
buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir
acompañada de fe en los que la oyeron.
-
HEB.4:12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y
más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el
espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las
intenciones del corazón.
-
HEB.5:13,14 Y todo aquel que participa de la leche es
inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; pero el alimento sólido es
para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos
ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.
-
HEB.6:1a Por tanto, dejando ya los rudimentos de la
doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección.
-
STG.1:21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y
abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual
puede salvar vuestras almas.
-
1PE.2:2 Desead, como niños recién nacidos, la leche
espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación,
-
2PE.1:4 Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y
grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la
naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa
de la concupiscencia;
-
2PE.1:19-21 Tenemos también la palabra profética más
segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra
en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en
vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la
Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por
voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados
por el Espíritu Santo.
-
2PE.3:15,16 Y tened entendido que la paciencia de nuestro
Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la
sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, casi en todas sus epístolas,
hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de
entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las
otras Escrituras, para su propia perdición.
Visite el RINCÓN DE LOS DIRECTORES con el artículo:
Pentálogo del desarrollo espiritual
Por Peter Amsterdam
Si quieres estar en buena forma
física, tienes que alimentarte bien, hacer ejercicio y dedicar algo de tiempo y
esfuerzo a adquirir buenos hábitos de salud. De manera similar, si quieres
desarrollarte espiritualmente —o podríamos decir, si quieres estar en buena
forma espiritual— es preciso que adoptes un buen régimen espiritual.
Ponerse y mantenerse en buena forma
espiritual toma tiempo. Exige cierto nivel de compromiso. Requiere disciplina.
Requiere sacrificio. También requiere fe, porque si priorizas tu vida
espiritual dispondrás de menos tiempo para otras cosas, y es posible que ahora
mismo estés tan ocupado que ni siquiera se te ocurra qué puedes cambiar.
Cuando me topo con obstáculos o
circunstancias que tienden a desviarme de mis compromisos para con mi salud
espiritual, el hecho de recordarme a mí mismo ciertas verdades me ayuda a
enfocar objetivamente las cosas. Tales verdades son:
- Entregarle a Dios mi tiempo y mi corazón es una
inversión duradera en la relación más importante de mi vida.
- El tiempo que dedico a Dios me hace mejor esposo,
padre, abuelo, amigo y persona. El estar con Jesús no solo me beneficia a mí,
sino a todas las personas que significan algo para mí.
- Aunque no le dedique suficiente tiempo a Dios,
confío en que Él está satisfecho con todos los esfuerzos que hago en ese
sentido, aun los más pequeños. Él conoce nuestra condición, nuestras
circunstancias, y está dispuesto a colaborar con nosotros.
Uno de los grandes anhelos de Dios
es tener una íntima relación con nosotros. Es reconfortante que Él esté más que
deseoso de ayudarnos a mejorar nuestra salud espiritual.
Pues bien, veamos ahora los cinco
puntos de nuestro pentálogo del desarrollo espiritual...leer mas
Hugo, en una escuela dando un mensaje del amor de Dios a
los niños y difundiendo literatura cristiana a la directora, en Limón.
¡Con mucho amor y oraciones!
Hugo y Elizabeth
Ministerio Luz Celestial, San José – Costa Rica
No hay comentarios:
Publicar un comentario